Cuando pensamos en las Bahamas, una de las primeras cosas que viene a nuestra mente es el mar de color turquesa, que ofrece ese brillo único en el paisaje. Lo que nunca imaginamos es que uno de estos escenarios idílicos, podría contar con la compañía de cerdos nadadores. Bienvenidos a la Isla de Cochinos.
No es que los animales representan una evolución de las especies. La explicación parece ser que un grupo de marineros los dejó en Cayo Mayor Grande, el nombre oficial de la isla en el archipiélago de Exuma Cays, con la idea de que podrían ser sacrificados y comidos en un futuro cercano. Resulta que los marineros nunca regresaron y los cerdos con algo de sufrimiento, pudieron aprender a nadar.
En 2009, los fotógrafos Eric Cheng y Jim Abernethy comenzaron a correr la voz, desde entonces, estos animales se volvieron una inusual atracción turística.
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